La segunda jornada del I Congreso Economía Plateada, organizado por la Institución Ferial de Extremadura-FEVAL y Adiper Servicios Sociosanitarios, y patrocinado por CaixaBank, ha sido clausurada por el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles. Durante su intervención, ha asegurado que para que haya una verdadera economía plateada hay que desterrar los edadismos. Además, ha detallado que la economía de los cuidados “genera arraigo y empleo de calidad y femenino”.
Vergeles ha agradecido a todas las empresas de los servicios sociales que operan en Extremadura su esfuerzo por seguir ofreciendo los mejores cuidados a las personas mayores y generando empleo de calidad, a pesar de las dificultades vividas en el último año.
Por otro lado, ha subrayado que las personas sénior pueden aportar mucho a la sociedad. “Si desaprovechamos su talento y experiencia estamos condenados a vivir en una sociedad menos rica. Seré más capaz si me fío de las generaciones de mayores y no les estigmatizo porque no son capaces”, ha apuntado. Además, prestar servicios adaptados a las necesidades de las personas mayores “también es una oportunidad de crecimiento económico. Dentro de la economía plateada debemos destacar la economía de los cuidados, un impresionante motor de desarrollo para las empresas”.
Por su parte, el director Comercial de CaixaBank en Extremadura, César Corcho, ha incidido en que la evolución demográfica hace que los sénior de hoy tienen 20 años más de esperanza de vida tras la jubilación y vivan un envejecimiento más activo. “Por eso, se trata de un sector de vital importancia para la economía. De ahí la importancia de crear productos y servicios destinados a un segmento que será un tercio de la población en 2030”, ha subrayado. Caixa Bank apoya este proceso y, en este sentido, ha creado el primer equipo de consejeros sénior para tratar el segmento de personas mayores y dar respuestas a sus necesidades.
Principales conclusiones
El presidente del Comité Científico del Congreso, Iñaki Ortega, ha resumido algunas de las conclusiones de este Congreso:
- La economía plateada es una gran oportunidad de crecimiento para los países.
- Para que esta economía pueda crecer es necesario fijar la atención en los aspectos positivos de la longevidad.
- Es necesario unir el conocimiento, la Administración Pública y la iniciativa privada para aprovechar las ventajas de la silver economy.
- La economía plateada es una gran oportunidad para Extremadura, porque “pocos territorios están tan preparados para ella”.
- Los sénior deben darse cuenta de que les quedan muchos años por delante y ser ellos quienes decidan cómo quieren vivirlos, y cuáles son sus necesidades.
- Hay que incentivar la formación de calidad para los mayores de 55 años.
- Es posible alargar laboral para aprovechar la fuerza económica de los sénior.
- El envejecimiento no es una realidad local, es universal afectando a todos los territorios.
El presidente del Comité Organizador del Congreso, Ángel Barrera, ha hecho hincapié en la importancia de haber posicionado a Extremadura en el centro de la silver economy. “Nuestro objetivo principal era traer conocimiento a la región y sensibilizar sobre la longevidad”, centrando la actividad de la Administración y de las empresas en las necesidades de las personas mayores. “Es necesario avanzar hacia la transversalidad, ya que el envejecimiento de la población incide en todos los ámbitos”, y todos deben avanzar juntos para mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
Atención a la dependencia
La primera mesa de la mañana ha profundizado en los cuidados y la atención a la dependencia como oportunidad para la economía plateada. El presidente de la Fundación Edad y Vida, Joaquim Borrás, ha enmarcado su intervención en el efecto del cambio demográfico en la sociedad: “Las personas mayores están creciendo y con ellas la economía relacionada con el ocio, la formación, la cultura, la sanidad, etc. No obstante, se trata de un colectivo heterogéneo”. Respecto a las necesidades de cuidados, Borrás ha reivindicado la integración sociosanitaria para mejorar la calidad de vida de las personas mayores, tanto en las residencias como en el domicilio. Para ello, la incorporación de las nuevas tecnologías a los cuidados resulta fundamental.
En la misma línea, la directora general de New Heath Foundation, Isabel Donado, ha subrayado la complejidad de gestionar el binomio cronicidad y dependencia. En este sentido, ha señalado que la atención desde el sistema sanitario no es sostenible. Por ello, Donado ha defendido la integración del eje social y comunitario: “Los servicios sanitarios curan, los servicios sociales atienden la dependencia y la discapacidad y los servicios comunitarios se ocupan de la vulnerabilidad”. De hecho, el proyecto de comunidades compasivas está articulado sobre la base de la cooperación con los sistemas social y sanitario, “mediante un modelo integrado que presta atención integral”.
Y el CEO de Supercuidadores, Aurelio López-Barajas, se ha centrado en el empleo del sector sociosanitario, “uno de los pocos nichos de crece hasta un 10 % anual”. Sin embargo, ha asegurado que el sector de los cuidados está poco cualificado y retribuido. “Debemos profesionalizar el sector de los cuidados, tanto en conocimientos como en habilidades. Para ello, debemos facilitar a los trabajadores el acceso a la formación presencial y, sobre todo, online. La formación es una inversión rentable, más aún para un sector que genera empleo estable y localizable”, ha destacado López-Barajas. Por todo ello, ha concluido que las empresas deben invertir más en formación para garantizar un servicio de calidad y la Administración Pública apoyar iniciativas encaminadas a reconocer la labor de los profesionales que atienden a las personas.
Participación de las personas mayores en la sociedad
En la mesa “Actividad social y laboral a partir de los 60 años” se ha puesto de manifiesto que la contribución de este colectivo a la sociedad es indudable e imprescindible. Así lo ha manifestado el vocal de la Junta Directiva y presidente de la delegación de Secot en Álava, Javier Fernández de Trocóniz, que ha confirmado la necesidad de que todos los talentos acumulados a lo largo de la vida “sigan estando al servicio de quien lo necesite después de la jubilación”. El día de la jubilación “recibimos el mayor de los capitales que es el tiempo”, ante lo que cabe preguntarse cómo se invierte: “Hay que cuidarse a uno mismo, dedicarse a los próximos y a los prójimos. La experiencia acumulada tiene una validez que va más allá de uno mismo”.
Alberto Bokos es uno de los creadores de la Plataforma 50, cuyo objetivo es alargar la vida laboral de las personas porque, como ha afirmado, “la longevidad tiene capacidad transformadora”. La vida laboral se está alargando en los países de la OCDE, la empleabilidad de las personas entre 55 y 64 años en España crece menos que en otros países, “aunque si consiguiéramos más empleabilidad en los colectivos sénior generaríamos más riqueza”. Y esto lleva a la “paradoja del envejecimiento”, porque aunque la silver economy es una oportunidad “aún cuesta mucho ponerse en marcha, abrir vías entre agencias públicas y privadas”. Por tanto, y en el momento actual, “es necesario empoderar a las personas y tomar conciencia de esta realidad”.
La directora de Aulas Senior Ategal, Paula Sande, ha asegurado que para su organización es esencial “poner a los mayores en el centro” en cada una de las actividades a realizar ya que, como ha explicado, se mueven buscando adaptarse a los cambios “con pasión”. Los mayores, según el perfil dibujado por Sande, son muy diversos y “hay que ser muy conscientes de esa diversidad para no ser exclusivos”, son exigentes porque “no se conforman con cualquier cosa”, confían mucho en las personas y en el trabajo, “son personas generosas, comprometidos y resilientes”. Por ello, ha concluido que los modelos de silver economy “debe tenerles muy presentes”.
Experiencias de la Administración Pública
En la mesa “La administración local y el nuevo modelo organizativo de servicios sociales y mayores”, el concejal del Área de Acción Social del Ayuntamiento de Bilbao, Íñigo Zubizarreta, ha destacado que Bilbao fue una de las primeras ciudades del mundo, en 2010, en adherirse al programa de ciudades amigables con las personas mayores, perteneciente a la red mundial creada por la OMS para que las ciudades analicen si están preparadas para acoger a población con un porcentaje creciente de personas mayores. “Bilbao es una ciudad amigable con las políticas, los entornos y las estructuras, lo que contribuye a un envejecimiento activo y saludable”, ha afirmado. Este compromiso que supone un cambio de paradigma se realiza, tal y como ha subrayado Zubizarreta, con la colaboración y participación de las personas mayores en la toma de decisiones “para aprovechar su potencial. Ellos son los protagonistas del cambio”.
Si bien la pandemia ha evidenciado la necesidad de cambiar el actual modelo de atención, el director general de Mayores del Ayuntamiento de Madrid, Juan Carlos Pérez Aguilar, ha señalado que el tamaño del municipio madrileño hace que la gestión sea complicada. “Estamos en la fase de participación en la que nos estamos cuestionando los servicios, la profesionalización del sistema, los nuevos perfiles de trabajadores, la prevención de la soledad, etc.”, ha apuntado. En cualquier caso, el Ayuntamiento de Madrid “invierte mucho en servicios sociales” y apuesta por facilitar la permanencia de las personas mayores en su hogar, a través de servicios domiciliarios como la ayuda a domicilio y la teleasistencia “que es una ventana que nos permite ver lo que está pasando en las casas”. Acortar la brecha digital es otro objetivo del equipo de Pérez Aguilar, así como la generación de programas de acompañamiento para luchar contra la soledad no deseada de las personas mayores y proyectos de respiro de los cuidadores.
El pueblo de Pescueza, de 150 habitantes, es un ejemplo de cómo las personas mayores pueden permanecer en su entorno con seguridad y calidad de vida. Su alcalde Andrés Rodríguez ha explicado cómo han logrado diseñar una cartera de servicios que responden a las necesidades de los vecinos. “Nos inquietaba el envejecimiento del pueblo y nos planteamos el reto de atender a las personas mayores para que no tuvieran que irse a una residencia fuera del pueblo. Así nació Quédate con nosotros”, ha explicado. Actualmente, Pescueza ha generado 14 puestos de trabajo de cuidadores que prestan el servicio de ayuda a domicilio, lavandería, comida a domicilio, etc., y cuentan con un centro social en el que disponen de servicios de higiene, podología, peluquería, etc. Próximamente, se creará un centro con plazas residenciales. “Cada persona tiene los servicios que quiere y necesita”, ha concluido.
Envejecimiento y empresa
En la mesa “Envejecimiento y empresa, retos y oportunidades”, el presidente de UNIR, Rafael Puyol, ha comenzado argumentando que “los sénior no son solo personas a las que vender cosas, a las que cuidar o entretener”. Son, según Pujol, “productores, trabajadores, emprendedores y voluntarios”. El trabajador sénior es, sobre todo “varón, entre 55 y 59 años, cada vez con mayor nivel de educación, a tiempo completo y en el sector privado, en el 80 % de los casos son asalariados y tienen mayor dificultad de encontrar un trabajo si pierde el empleo”. Pero, a pesar de este perfil, Puyol ha reconocido que sí existe edadismo, “basado en estereotipos y concepciones equivocadas, definiéndoles como más anticuados o trabajadores más caros”. Sin embargo, no hay razón para mantener esas ideas.
Por su parte, el Partner de Exec Avenue, Alfonso Jiménez, ha insistido en que el trabajo por cuenta propia “es un refugio” para este mercado que debe buscar el equilibrio entre edad de jubilación y trabajo. “La probabilidad de encontrar un trabajo por cuenta ajena a partir de los 50 años es menguante”, por lo que este colectivo debe optar por el trabajo por cuenta propia, que es la alternativa real para “sentirse útiles y tener unas condiciones labores justas”. Esta opción laboral, según el perfil dibujado por Delrieu, ocupa al 17 % de los trabajadores españoles: “Es muy masculino, es más estable en el tiempo y uno de cada cuatro son sénior. Además, es un grupo que se va incrementando durante la vida laboral (a partir de los 45 años crece notablemente)”.
Por último, el consejero delegado de Atenzia, Benigno Lacort, ha expuesto cuáles son las oportunidades que existen hoy para los sénior en el mundo productivo. De hecho, la longevidad es “la mayor oportunidad para el mercado en el siglo XXI, si se hacen las cosas bien”. En primer lugar, es muy importante analizar el mercado competitivo, acompasar el modelo productivo al envejecimiento de la población y aprovechar los beneficios de las ciudades inteligentes. Y no se puede olvidar la relevancia de la tecnología, “que ha demostrado ser el cordón umbilical durante la pandemia”. De hecho, Lacort cree que “es urgente invertir en tecnología que ayude a cuidar de forma predictiva”.
Respuestas especializadas
Para hablar sobre “Cuidados sociosanitarios en la vida de la persona mayor. La importancia de generar respuestas especializadas”, la directora regional para las Politicas Públicas Integradas e Longevidade de Madeira (Portugal), Ana Clara Vieira Mendonça e Silva, ha compartido la apuesta que está realizando su departamento por las políticas de longevidad, “con el objetivo de convertirnos en amigos de la longevidad y dar respuesta a las necesidades de salud de los mayores”. Para ello, están dando pasos en tres direcciones: impartir más educación sobre longevidad, transformar la longevidad en oportunidades e impulsar la colaboración público-privada para afrontar esos retos. El concepto de atención integral implica los cuidados a domicilio y el cambio del modelo de atención residencial, “personal e individualizado en función del grado de dependencia de la persona”.
Por su parte, el director gerente del SEPAD de Extremadura, José Vicente Granado, ha explicado que la Junta de Extremadura está trabajando en dos líneas. Por una parte, en políticas encaminadas a la desinstitucionalización de las personas y su mantenimiento en el hogar el máximo tiempo posible de manera autónoma, “gracias a la prestación de servicios sociosanitarios especializados en su hogar como la ayuda a domicilio, la teleasistencia avanzada, el cátering, etc.”. Por otra parte, la conversión de los centros de día, “que no funcionan”, en centros comunitarios o polivalentes, donde se prestan los servicios profesionales de calidad que las personas necesitan: terapia ocupacional, catering, podólogo, etc. Próximamente, el SEPAD de Extremadura va a dar un paso más: “Estamos a punto de adjudicar ocho centros especializados, uno por área sanitaria, en los que se implantará un nuevo modelo de atención para personas polimedicadas, con demencias, varias patologías, etc.”, ha concluido.